Listos o no, preparados o no, mentalizados o
no, con libras de más, de menos o con hambre, con resaca post celebración o sed
insaciable, con mucho que contar o algo por olvidar, como sea que llegáramos a
este momento la realidad es que aquí nos
llegó el 2016, viene con un lista de retos bastante interesante, muchas cosas
por hacer, muchos cambios por venir, muchas cosas por re-pensar y re-crear, y
es que el 2015 fue un año bastante movidito, por decir lo menos, y nos dejó en
nuestro registro mental varias cosas de mayor o menor impacto, depende de quien
lo quiera ver.
Socialmente, en Guatemala, nos mostró una transformación
social impresionante, las plazas fueron tomadas con todo respeto y orden en
aras de exigir justicia, el eco de las voces resonó por todo el país y se
lograron algunos cambios muy importantes, pero por sobre todas las cosas el
guatemalteco se dio cuenta que unidos los chapines tenemos más fuerza y nos
gustó estar unidos, no hubo de izquierda o de derecha, no hubo ricos o pobres,
no hubo diferenciación por color de piel, no hubo hombres o mujeres, no hubo religión
alguna, simplemente hubo guatemaltecos dando los primeros pasos en la construcción
de un mejor país.
Hubo unas elecciones de lo más inesperadas, por
decirlo de alguna forma, y tendremos un nuevo gobierno en este 2016, uno que
esta advertido de lo pendientes que estamos lo ciudadanos de lo que haga o deje
de hacer, porque entendimos que no nos están haciendo un favor sino que están trabajando
para nosotros, están siendo pagados por nuestros impuestos y que es nuestra obligación
exigir que las cosas se hagan bien, algunos por allí querrán seguirse haciendo “los
vivos”, pero está en nosotros mostrarles que indiferentes y en silencio ¡NUNCA MAS!
Ahora bien, la pregunta es ¿ya está todo
resuelto?, la respuesta es simple NO, aún falta mucho por pensar, mucho por
hacer, hay muchos cambios por generar y debemos poner atención a todos los
cambios, no solo a nivel gubernamental, también a nivel social, familiar y
persona, debemos crear desde un inicio seres diferentes y ayudar en la transformación
de los que ya llevamos un tiempito recorrido por este mundo, necesitamos seres
sin miedo a expresarse, con capacidad de propuesta, con entendimiento de
derechos y obligaciones, que busquen justicia, que entiendan de igualdad, debemos transformar nuestra sociedad y esa es
responsabilidad de cada uno de nosotros.
Así es pues que, el 2016 se presenta como un
año de retos por excelencia, y después de unos días de descanso para algunos, de
mucho trabajo para otros y de angustia para muchos más, estamos iniciando otra vuelta al sol, una
medida relativa que nos ayudara a ponerle marco al inicio de una transformación
que hace mucho venimos dejando en pausa, no podemos esperar 50 años más para
dar el siguiente paso, es momento de hacer patria y trabajar fuertemente en
construir una sociedad tolerante, inclusiva, que aprenda a ver en sus
diferencias una fortaleza y que de la mano caminen hacia el futuro que tanto
tiempo llevamos buscando.
El mundo está en pleno caos, guerras y
atentados por todos lados, indiferencia e inequidad rebalsando en cada
rinconcito del planeta, el panorama no es muy alentador que digamos pero
tenemos la oportunidad de ir cambiando un paso a la vez, una vida a la vez.
Un abrazo y mis mejores deseos para que este
2016 los humanos empecemos a ser eso, humanos, y que las cosas importantes en
la existencia tomen un lugar relevante en cada una de nuestras vidas,
recordando la importancia del aquí y ahora y formando, paso a paso, la realidad
que queremos.
2016… ¡allá vamos!