Todo era fiesta y alegria, risas y felicidad, cada uno gritaba y cantaba y muchos desde su alma lagrimas derramaban, demostrando su fervor inigualable y su amor incondicional, cada uno llevaba sus mejores atuendos y el instrumento que más ruido hiciera para celebrar con estruendos, debían de ser días de conmemoración, correrían por las calles, llevarían antorchas, tomarían ron o cerveza, el más nacionalista tomaría más, cantarían el himno y recordarían la patria del ayer que poco a poco ha estado muriendo, ¡pero había que celebrar carajo!
Las carreteras del país y las calles de las principales ciudades se llenaron de corredores patrióticos, quienes con antorcha en mano y vistiendo los colores de la bandera, lideraban caravanas de otros corredores espontáneos y vehículos decorados y cargados de seguidores, quienes con gritos, silbatos y fanfarrias apoyaban al corredor, el cual representaba a aquellos que antaño corrieron a esparcir la noticia de la independencia a los rincones más lejanos del país.
El tráfico que generaban los patriotas poco importaba, las largas filas y congestionamiento valían la celebración, tampoco importaba aquel día la violencia, los asaltos, la corrupción, la impunidad, las muertes de inocentes, los secuestros, las extorciones, el hambre, la desigualdad, la falta de educación, las falta de oportunidades, la carencia de identidad y mucho menos el sexismo, racismo y clasismo imperantes, ¡hoy era de día de celebrar y nada más!
La meta era el punto de encuentro de las ciudades, en donde alegres ferias esperaban por los patriotas, con ventas de comida, licor y demás accesorios propios de cualquier fiesta, era el momento ideal para tomar la respectiva instantánea del momento y subirla a Facebook, para que todo el mundo supiera los patriotas que son, y como el canto de la cerveza del momento decía "yo también nací aquí" entonces todos deberían tomar esa cerveza porque "es nuestra" y ¡embriaguémonos de patriotismo señores!
El lunes será otro día, en el que llegare tarde a trabajar, y eso no es robarle al patrono, es que hay mucho tráfico, y dejaran a medias las cosas, porque igual nadie lo ve, y pagaran mordida a los policías porque aquí así es la cosa, y no denunciaran porque aquí la ley no camina, y gritaran a los demás porque así entiende la gente aquí, y discriminaran al prójimo porque son diferentes, y no buscaran solución porque aquí las cosas no cambian, y evadirán impuestos porque el gobierno solo roba, y no harán aportes positivos porque aquí ni los escuchan, y seguirán recordando la independencia para celebrar porque ¡hay que celebrar carajo!
Con banderillas en las ventanas de los carros y caras pintadas de azul y blanco, pareciera que se está cumpliendo con el amor a la patria, pero no todo es fiesta y bulla, hay quienes sin mucho escandalo luchan por un país mejor, que a diario buscan edificar con el ejemplo, que sin cerveza, ron o antorchas enseñan a sus hijos lo que amar la patria significa, los que enseñan la historia para que no se repita, los que día a día dan un grano de arena en este mar de retos diarios
Yo también celebro a mi Guatemala mis amigos, mas no con las antorchas que exasperan a cualquiera obligando al resto de la población a hacer filas de horas y por alguna razón eso no es violar el derecho a la locomoción, tal vez algún día alguien me pudiera explicar porque, pero celebro mis compatriotas por el guatemalteco que lucha cada día para ser mejor, por el que se levanta de madrugada a cuidar la milpa y enseña a sus hijos el valor de las cosas, por ese que vive los valores, por ese que respeta e integra la sociedad, por ese que aporta, por ese que deja el alma por un país mejor, celebro por la Guatemala que todos queremos, celebro a mi Guatemala que me dio el privilegio de nacer aquí, celebro a la Guatemala que deja poder llamarme guatemalteco con orgullo y que en su historia llena de cicatrices nos ha dejado lecciones por aprender y noblemente espera que aprendamos, tal vez algún día lo hagamos.
Yo celebro pues a mí Guate, pero no porque esté de moda, sea cool o pueda ser publicado en Facebook, celebro por la Guate que día a día quiero construir con mi patriotismo, haciendo lo que me toca hacer, luchando por esa mejora día a día, proponiendo, encendiendo en el alma de mis compatriotas un patriotismo de verdad, un patriotismo de amor, un patriotismo de compromiso y dignidad, un patriotismo que mi Guate merece desde hace años
Antorchar, tragos, banderas y trafico lo pueden hacer en cualquier lugar, una Guatemala mejor solo la podemos hacer nosotros, empezando en nosotros mismos
¡QUE VIVA GUATEMALA! Orgulloso de este pedazo de tierra en el que tuve el privilegio de nacer.
Feliz cumpleaños Guate y discúlpame si no lleve antorcha o tome cerveza, estaba ocupado tratando de ser un poco mejor para ti, y sé que muchos otros también hacían los mismo…